Con un cierre lleno de entusiasmo y compromiso, los alumnos de segundo año de nuestra institución culminaron el proyecto de extensión Gotas que Salvan, una iniciativa que no solo enriqueció sus conocimientos científicos, sino que también despertó en ellos una profunda conciencia ciudadana sobre la importancia de la donación voluntaria de sangre.

Un cierre que inspiró a toda la comunidad

La jornada de cierre, realizada en el hall de la escuela, fue un espacio vibrante donde los estudiantes compartieron con la comunidad educativa los frutos de su aprendizaje. A través de afiches coloridos, presentaciones dinámicas y recursos creativos, los jóvenes expusieron conceptos clave: desde la función vital de la sangre en el cuerpo humano hasta los requisitos para convertirse en donante, pasando por la desmitificación de creencias erróneas y el impacto transformador de este acto solidario en la sociedad.

Ciencia y compromiso de la mano

El proyecto contó con la participación de profesionales de la salud, incluyendo bioquímicos y representantes del Instituto Provincial de Hemoterapia (IPHEM). Sus charlas brindaron información precisa y accesible, respondiendo preguntas y conectando la ciencia con la realidad cotidiana. Esta interacción no solo enriqueció el conocimiento de los estudiantes, sino que también fortaleció el vínculo entre la comunidad educativa y el compromiso social.

Un trabajo colaborativo y transformador

Bajo la guía de las profesoras Gabriela Coto y Ángela Quevedo, y con el apoyo de docentes del área de Biología, los estudiantes transitaron un proceso pedagógico que combinó rigor científico con creatividad. Cada etapa del proyecto fue diseñada para fomentar la reflexión crítica, el trabajo en equipo y la empatía, valores esenciales para formar ciudadanos responsables.

Sembrando conciencia para el futuro

Gotas que Salvan trascendió los objetivos curriculares, dejando una huella imborrable en los estudiantes. Más allá de los saberes técnicos, esta experiencia sembró en ellos la semilla de la solidaridad y la responsabilidad social, demostrando que pequeños gestos pueden salvar vidas. Celebramos el compromiso de nuestros jóvenes y el esfuerzo conjunto de docentes y profesionales que hicieron posible este proyecto transformador.

¡Gracias a todos los que formaron parte de Gotas que Salvan! Seguimos apostando por una educación que une conocimiento, empatía y acción para construir un futuro más solidario.